Crítica: Written In Blood – Written In Blood (2022)


El constante zumbido de las moscas revoloteando era ensordecedor. A su alrededor, decenas de amigos se hallaban colgados. Sus cuerpos sin vida se balanceaban con desidia creando una danza espeluznante. Mientras tanto, él seguía allí. Respirando a duras penas por las heridas infringidas por el sacerdote. Decía que la única forma de salvar su alma era reconocer a Cristo como el único y verdadero Dios. Sin embargo, el nórdico jamás cedería. No tardaría mucho en entrar en el Valhala. Cenaría todas las noches con los dioses, y batallaría con sus hermanos de armas hasta el fin de los tiempos. Tan solo no debía ceder a las torturas, tan solo podía aguantar, tan solo…. tan solo quería seguir viviendo….
Bienvenidos al universo de Written In Blood.

Los Melodic Death metaleros Witten In Blood, editaron el pasado 2 de diciembre de 2022 su homónimo primer Larga Duración gracias a Trollzorn Records.  

La alineación del combo es: Bert «Beef» Hoving (bajo y voz), Marcel Heutink (guitarra rítmica), Jeffrey Zwart (guitarra solista), Jos Eggens (batería). 

Qué largo se me ha hecho catar el debut de los de Países Bajos. Supongo que más que por falta de calidad real, es por la forma de estructurar las canciones en sí. Básicamente, con un ritmo de tambores tibio y más bien estático se pasan las 9 canciones que componen el álbum. Para que me entendáis, tienen el mismo tempo que suele usar Amon Amarth, donde ni son rápidos, ni lentos, tan solo aburridos, o al menos para un servidor lo es y mucho. Por supuesto, las seis cuerdas tampoco llaman demasiado la atención, logrando que mi interés inicial se diluyese al transcurrir un par de temas. Ahora bien, siendo completamente justos, objetivamente hablando no lo hacen mal, y gustará sin duda a los seguidores del grupo de Johan Hegg y compañía.

Las «hachas», dramáticas y pesadas muestran un escaparate de riffs más bien escaso. Sobra decir que existen las dobles armonías ¿no? Por su parte, los solos, pasan sin pena ni gloria. Vale, son correctos, pero ya está.

Agradezco profundamente que no se metiesen en terrenos experimentales con los registros vocales. Growls y solos growls, sin memeces de clean vocals o efectos innecesarios es lo que escucharéis salir de las cuerdas vocales de Bert «Beef» Hoving.

Ya lo he dicho en el párrafo principal, la percusión se mueve sobre todo a medio gas, apareciendo up tempos de pulso lento de vez en cuando.

Me cuesta recomendar alguna de sus canciones, ya que son parecidas entre sí. A pesar de ello, por su inicio feroz, echadle un oído a ‘Wilde Jacht‘, no sin antes advertiros que se desinfla en su segunda mitad.

Llegados a este punto, en vuestras manos está darle una oportunidad a Written In Blood. Os insto a que lo hagáis para así tener una percepción personal del plástico.

Nota: 5 
Autor: Chus 

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