El próximo 9 de febrero verá la luz el segundo álbum de larga duración de la banda de Black Metal, Hulder, titulado “Verses in Oath”, a través de 20 Buck Spin.
La formación de Hulder está conformada por Hulder (guitarra, voz, sintetizador), Necreon (bajo) y CK (batería).
Hablar de Hulder es hablar de una de las bandas de Black Metal con mayor proyección en el panorama underground, llegando a encabezar su propio tour por EE.UU. Desde su formación en el año 2018 han sabido evolucionar de la manera correcta, sin perder su propia identidad y sobretodo, manteniéndose fieles al sonido clásico del Black Metal.
“Verses in Oath” está compuesto por diez canciones, siendo una de ellas la intro y una duración total de cuarenta minutos en los que Hulder nos ofrece un disco repleto de matices, por lo que se trata de un trabajo muy completo, provocando múltiples sensaciones en el oyente. Por una parte, nos vamos a encontrar con una gran cantidad de riffs oscuros y violentos, a base de trémolos y crudeza, todo ello acompañado de un teclado atmosférico, el cual se mueve entre la frialdad y las tinieblas, otorgando una gran profundidad a las canciones y por tanto, mucha fluidez. Por otra parte, también nos vamos a encontrar con algunas transiciones, como ‘Lamentation’; un pequeño tema que suena realmente tenebroso, con un sonido envejecido, como si de una gramola estropeada se tratase; y también ‘An Offering’, la cual contiene unos coros limpios y fantasmagóricos acompañados de teclados; muy apropiada para introducir la siguiente canción, ‘Cast Into The Well Of Remembrance’, un mid-tempo con un punto de melancolía, pero con algunos cambios de tempos, a base de blastbeats demoledores.
En cuanto a la sección rítmica, como ya habréis podido deducir, se trata de un trabajo que se mueve entre el blastbeat y el mid-tempo; imposible caer en la monotonía con semejante trabajo rítmico.
El registro vocal se trata de un shriek realmente agresivo, acompañado en unas pocas ocasiones por coros limpios.
Resumiendo, “Verses in Oath” es un trabajo que nos hace retroceder hasta los 90. Todo aquí suena como el Black Metal debería seguir sonando, con personalidad propia, pero sin descuidar la crudeza y las atmósferas.
Nota: 8
Autor: Ramón
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