Crítica: Heads For The Dead – The Great Conjuration (2022)


La lluvia caía con fuerza mientras los truenos retumbaban en todo paraje. No era una tierra fértil, todo lo contrario. Allí no se podía plantar nada. Sin embargo, era ideal para enterrar cuerpos, estuviesen vivos o muertos. Mary, fue secuestrada y violada en repetidas ocasiones. Cuando los cerdos acabaron, no podían dejarla allí tirada. Sabían que aún respiraba a duras penas. No obstante, y tal como la habían dejado pensaban que no le quedaba demasiado, así que decidieron hacer un agujero y arrojarla dentro. Al no taparlo correctamente y gracias a la que estaba cayendo, la muchacha consiguió salir a la superficie. Lo primero era lo primero: pedir ayuda. No tenía pensado denunciar, mas sí vengarse. Entre gritos ahogados y lágrimas de frustración e ira juró que acabaría con ellos….
Bienvenidos al universo de Heads For The Dead.

«The Great Conjuration» es el título del tercer Larga Duración de los Death metaleros Heads For The Dead. Fue lanzado el 2 de septiembre de 2022 por Transcending Obscurity Records.

La alineación del combo es: Ralf Hauber (voz), Jonny Pettersson (guitarra, bajo y teclados), Matt Moliti (guitarra solista), Jon Rudin (batería).

Bueno, dejémonos de presentaciones e información objetiva, y vayamos a la reseña en cuestión. ¿Los amantes del «Metal Muerto» quedarán satisfechos con este disco? Pues sí y no. Me explico. Cada tonada no muestra ni el más mínimo resquicio de mediocridad compositiva, todo lo contrario. La propuesta del conjunto internacional es sólida a más no poder. A pesar de ello, no llega a asombrar ni a destacar por nada, resultando algo genérica.

Cada nota que sale despedida de las «hachas» de Mr Pettersson y Mr Moliti desprende un hedor a muerte y maldad considerable, aunque les falta un último empujón para ser completamente letales y adictivas.

Me es imposible poner pega alguna al apartado vocal. Growls malévolos a troche y moche, con alguna leve inclusión de guturales agudos rasgados.

El kit de tambores es golpeado con dinamismo. Eso sí, tal vez predomine algo más la rotundidad que la celeridad. Advertidos quedáis.

Por su ferocidad, destaco ‘Rotten Bastard‘. Os garantizo que la canción va directa a la yugular.

Sin ser un mal plástico, «The Great Conjuration» no me ha llamado la atención. ¿Y a vosotros que os parece? Para poder opinar sobre él, lo mejor será que le prestéis atención.

Nota: 6
Autor: Chus

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