Crítica: Nadir – The Sixth Extinction (2017)

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Después de la caída del meteorito que acabó con los dinosaurios, comenzó una nueva era en la Tierra. Millones de años de evolución hizo posible la existencia de todos los seres vivos tal y como lo conocemos. Sin embargo, todo es cíclico. Lo que una vez sucedió tarde o temprano volverá a pasar. A pesar de las precauciones y advertencias de la NASA, una nueva roca estelar chocó con el astro azul. El seísmo que provocó, originó una espesa capa de polvo que impedía a los rayos solares entrar el globo terráqueo. Millones de ánimas murieron en el acto. Los pocos supervivientes se fueron ahogando lentamente. Sin duda, el desastre supuso el fin que daba paso a un nuevo origen….
Bienvenidos al universo de Nadir.

Activos desde 1993, el combo de Death Doomcore Nadir nos trajeron el 4 de diciembre de 2017 su hasta la fecha último trabajo "The Sixth Extinction", vía Grimm Distribution, NGC Prod y Satanath Records.

El line up es: Ferenc Gál (bajo), Szabolcs Fekete (batería), Norbert Czetvitz (guitarra), Hugó Köves (guitarra), Viktor Tauszik (voz).

Aplastante se nos presenta el nuevo asalto de los de Hungría. Imaginaos que los titanes del Sludge Crowbar decidiesen que viera la luz una vena de "Metal Muerto" hasta entonces desconocida por todos. ¿Os habéis hecho la idea?, pues más o menos es como se las gastan estos tíos. Las tonadas son tan agónicas como dramáticas e intensas, dañándonos en lo más profundo de nuestra alma con las contundentes notas que salen de sus instrumentos. En cuanto a producción, tengo que hacer una vez más referencia al grupo de Kirk Windstein, ya que las seis cuerdas suenan muy similares. Por cierto, no sé qué os parecerá a vosotros, pero para mí, el artwork es apabullante. Transmite en una sola imagen lo mismo que hace la música que el álbum contiene.

La palabra que mejor puede describir a los riffs es sin duda "contundencia". Hallamos unas "hachas" fluidas, a doble armonía, pesadas y poderosas, donde se adjunta si la ocasión lo requiere ramalazos core.

Los tonos vocales son desesperados y grabes. Por otro lado, tropezaremos con alguna clean vocal narrada y pinceladas de coros.

Era obvio, una agrupación de estas características no podía ser muy dada a la velocidad. Los parches son golpeados a medio gas. No obstante, atención que alguna sorpresa acelerada encontraréis.

Recalcaría "Mountains Mourn" y "Ice Age in the Immediate Future: III. A Matter of Survival" por ser las canciones más trepidantes. Aunque si deseáis saber cuál es la tónica general del Long Play, echadle una escucha a "Fragmented" o a "The Debris Archipelago".

Amantes de los mid tempos más asfixiantes, no dejéis escapar este C.D.

Nota: 7
Autor: Chus

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