El horno crematorio tenía doble fondo. Ningún cadáver era realmente calcinado. Se transportaba de forma lenta por una cinta mecánica a lo más profundo de las catacumbas que estaban debajo del edificio. Una vez allí, los restos se dejaban en un enorme cuenco de barro. El recipiente, manchado de vísceras y sangre, estaba adornado con figuras de espeluznantes seres. Al cabo de unos minutos, un ser carente de forma emergía del suelo. Devoraba al muerto. Poco después, lo vomitaba. De la espesa regurgitación crecían lo que se podía decir que eran sus hijos. Amasijos informes de carne con una voraz hambre por carne humana. Pronto, muy pronto su número se contaría por centenares y subirían a la superficie……
Bienvenidos al universo de Dripping Decay.
Satanik Royalty Records lanzó el pasado 17 de agosto el primer L.P de los Death metaleros Dripping Decay «Festering Grotesqueries».
Su line up es: Eric Stucke (voz), Neil Smith (guitarra), Jackson Jordan (bajo), Jason «The Machine» Borton (batería).
No exagero ni un ápice si os digo que el debut de los americanos está a la misma altura que los clásicos intocables del género. Amigos, de verdad, estamos ante uno de los mejores Elepés del año. El «Metal muerto» que ejecutan es terriblemente trepidante y macabro. Aquí no hay lugar para el aburrimiento ni para darse un respiro. Los tracks se suceden uno tras otro a velocidad de vértigo, mostrando una colección de riffs absolutamente devastadores. Además, no temen acercarse levemente al grindcore si la ocasión lo requiere. Respecto a la producción, ésta es cruda, orgánica y sucia en su justa medida. No solo no os perderéis ni una sola nota, sino que también no tendréis la sensación de estar ante un producto sintético.
Impresionante son las seis cuerdas. Da gusto toparse con un muro sónico tan sólido y adictivo. La fluidez y las acometidas de tremolo picking os van a dejar simplemente maravillados. La lead guitar se anima sobre todo en la recta final del plástico, y yo que lo agradezco.
No os preocupéis por las voces. Como era de esperar, no hay contemplaciones ni concesiones a la siempre innecesaria comercialidad.
De normal soy de los que le prestan más atención a las «hachas» que al aporrear de parches. No obstante, si alguien golpea el kit de tambores como Jason «The Machine» Borton capta mi atención y gana mi admiración al instante. ¡Vaya tela!
Por una vez no voy a destacar los temas que me gustan, ya que menos el intro inicial y el outro final, el resto son impecables. Necesitáis, que digo necesitáis, estáis obligados a comprar «Festering Grotesqueries».
Nota: 10
Autor: Chus
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