Crítica: Internal Organs External - The Brutality of Tomorrow (2022)

El gigantesco robot era imparable. Daba igual la cantidad de soldados que intentasen acabar con él, o la potencia de fuego usada en su contra. Sin duda, era el arma definitiva. ¿Dónde podría refugiarme? Supongo que en ninguna parte. Pelear no era una opción. ¿Qué podía hacer un debilucho como yo? No tenía esposa ni hijos, estaba solo. Me pasé toda la vida encerrada en mis maravillosas cuatro paredes, pendiente de la pantalla del ordenador. Algunos dirían que eso no era vida, pero a mí me encantaba. Qué rápido se llega a destruir la zona de confort ¿verdad? Supongo que de momento seré de los pocos supervivientes al ataque, al igual que también estoy seguro de que no será el último. ¿Vendrán más engendros mecánicos?, ¿estará ocurriendo lo mismo en todas las grandes ciudades? No lo sé. Ahora ya da igual. Supongo que no tardaré demasiados días en morir…
Bienvenidos al universo de Internal Organs External.

El segundo L.P de la One Man Band de Slam Brutal Death Metal Internal Organs External saldrá el 30 de septiembre de 2022. Se titulará «The Brutality of Tomorrow» y será editado gracias a Vicious Instinct Records.

El hombre encargado de dar vida al proyecto es Vince Otero, que por supuesto se encarga de todos los instrumentos y las voces.

Confieso que hace bastante tiempo que tengo abandonado el género anteriormente mencionado. No es que me haya dejado de interesar, sino que como creo que nos pasa a todos, tenemos épocas donde tendemos más hacia un estilo u otro. Ahora bien, una vez le di al play al redondo que protagoniza la reseña que ahora leéis, la verdad es que me sentí como si volviese a ver a un viejo y querido amigo. Seguía valorando y disfrutando la forma de encarar la música extrema que Mr Otero me proponía a lo largo y ancho del Larga Duración en cuestión. Su principal virtud es la cantidad de giros que tienen las tonadas. Vale, cierto es que la rotundidad es lo que prevalece, mas es sorprendente el escaparate de riffs que exhibe. De esta forma, su escucha, además de ser terriblemente intensa, se aleja por completo del temido pozo oscuro donde reside lo aburrido.

Como decía, las «hachas» son simples y contundentes hasta decir basta, con una capacidad de variación increíble. No estamos solo ante un festival de palm mutes. También degustaréis de ataque de tremolo picking, anecdóticos armónicos y alguna que otra doble armonía. Como sorpresa, para mí no demasiado grata, existen escasas, muy pero que muy escasas pizcas de electrónica. ¿De verdad era necesario?

Los registros vocales son todo lo enfermizos que podáis imaginar, y un poco más. Growls cavernosos, guturales agudos rasgados y algún pig squeal aislado.

Los tambores suelen ser aporreados a medio gas. La velocidad existe, pero tiene un espacio más bien pequeño dentro del álbum.

Destaco la inicial ‘Propagating the Execution‘. Al oírla, sabréis cual es el sello de identidad de Vince en materia de creación.