Crítica: TripleMurder – Pre – Meditated (2019)


¿Dónde estaba? Todo era tan confuso… La cabeza le palpitaba sin cesar produciéndole nauseas. Miró a su alrededor. A la derecha había una joven.  A juzgar por su aspecto, dedujo que posiblemente tendría su misma edad. Era obvio que ambos estaban metidos en el mismo lío. Le preguntó quién era y si sabía en qué lugar se hallaban. Le dijo que se llamaba Susan y que no tenía idea de qué estaba pasando.  Al cabo de un rato, cuando al fin dejaron de estar desorientados, llegaron a la conclusión de que estaban en el sótano de alguna vieja casa abandonada. Intentaron abrir la trampilla sin ningún éxito. De repente, se oyeron ruidos procedentes del piso superior. Varias pisadas se acercaban. Al abrirse la portezuela, la silueta de tres seres amorfos apareció ante sus atónitos ojos. Sin mediar palabra, se abalanzaron contra ellos. Le propinaron una paliza de muerte a la chica, dejándola tirada en el suelo. A él se lo llevaron arriba, no sin antes partirle las extremidades. Lo colocaron en una enorme mesa donde fue degollado de un solo golpe con un machete oxidado. De fondo, se podía escuchar los sollozos y gritos de ayuda de Sue que sabía que la muerte no sería el peor de los finales a esa malévola situación.
Bienvenidos al universo de TripleMurder.

TripleMurder, editarán su primer E.P «Pre-Meditated» el próximo 20 de septiembre de 2019.

El combo lo forma: Erich Mueller, Maxwell Fourtin-proux y Zachary Lemay.

Más de uno estará diciendo «vale muy bien, ¿pero qué hacen?» Pues debo deciros que tienen un alto componente inclasificable. Está claro que el ADN Groove está más que presente. Sin embargo, los ramalazos de Death, Melo Death y Metalcore también lo están, y mucho. Esto puede resultar un poco desconcertante así descrito, mas os garantizo que los de Ottawa lo mezclan y ejecutan a la perfección. A decir verdad, su propuesta resulta fresca. Vale, no diremos que no se les nota las diferentes influencias de forma descarada, pero consiguen un sello único realmente convincente. Da gusto cuando llegan grupos que intentar salirse de lo establecido y encima lo consiguen. La producción no es mala, aunque resulta un poco amateur. Con respecto a la portada, pues bueno, ni fu ni fa. No es gran cosa, inquietante si acaso.

Las guitarras, siempre violentas, nos fuerzan queramos o no a hacer headbanging de forma convulsa. Ataques fluidos, breaks, momentos de tremolo picking, armónicos….. Madre del amor hermoso, ¡así da gusto! No podía dejar de nombrar los correctos solos que aparecen a lo largo y ancho del Extended Play.

Predominan los guturales agresivos en lo que a registros se refiere. ¿Hay sorpresas? …. SÍ. Cuando menos lo esperéis, irrumpen unos tonos de carácter más agudo rasgado. De forma anecdótica, también hay pig squeals, clean vocals y coros. ¿Dónde? Os dejo que lo descubráis por vosotros mismos.

¿Cómo va la sección rítmica? pues de normal a medio gas. Esto no quiere decir que se olviden de los up tempos ni de los buenos latigazos de «golpes relámpago».

Me han llamado la atención especialmente ‘Crawl’ y ‘Ready To Bleed’. ¡Temazos que os dejarán con la boca abierta!

Si buscáis algo original, TripleMurder os lo dará.

Nota: 7
Autor: Chus

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