En 1998 se forma en Paris la banda de Old School Death Metal, Tales of Blood, bajo el nombre de Bloodbath, siendo cambiado al actual nombre en el año 2000. En 2002 ve la luz un mini álbum, titulado “Range of Gore” y cuatro años más tarde, lanzan “Horrors of the Flesh, bajo el sello Painkiller Records. Tras varios cambios de formación, el próximo 31 de julio será editado su nuevo disco, llamado “Stuffing the Graveyard”, a través del sello Pathologically Explicit Recordings y además, el sello ruso Careless Records, lo lanzará en formato digipack.
La formación de Tales of Blood consiste en Sam (voz), Nyv (guitarra), Jerôme (batería), Remi (bajo) y Jean-Michel (guitarra).
En “Stuffing the Graveyard” lo que nos encontramos son once composiciones de Death Metal clásico, sin experimentaciones ni un sonido refinado o moderno, como queráis llamarlo. Sus riffs son crujientes y crudos, destilando muerte y putrefacción en cada compás, sin prácticamente ningún solo, aunque si encontraremos algún que otro pasaje oscuro cercano al mid-tempo donde las guitarras obtienen un mayor protagonismo, como por ejemplo, a lo largo del tercer tema ‘Vacant Slaughter Job’. En líneas generales, es un trabajo bastante lineal, lo cual no es ni bueno ni malo, de hecho hay bastantes discos de culto que también lo son, pero yo, personalmente, si que prefiero un poco más de variedad sonora. Lo que está claro, es que Tales of Blood han compuesto un álbum que rezuma una atmósfera absolutamente enfermiza.
La sección rítmica, mayoritariamente, se mueve a través de secciones veloces y mid-tempos, siendo estos últimos los que añaden ese plus de toxicidad y morbosidad.
El registro vocal es un growl de carácter grave, alternado en ocasiones con un rasgado de tonos más agudos, por lo que en este sentido, el dinamismo está asegurado.
En resumen, “Stuffing the Graveyard” es un trabajo que satisfará a los fans del Death Metal de la vieja escuela, aunque estoy seguro de que Tales of Blood pueden dar más de si.
Nota: 6
Autor: Ramón
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