Crítica: Benighted – Obscene Repressed (2020)


Hasta ese instante, no había conocido el auténtico miedo. Había visto como unos seres horripilantes descuartizaban a su marido y su hijo. El corazón le latía tan rápido que pensaba que le iba a estallar. Tenía que salir de allí como fuese. No podía parar un segundo. Si lo hacía, las bestias la atraparían. La cueva donde se hallaba era inmensa y laberíntica. Para más inri, la visibilidad era muy limitada. Al cabo de un par de minutos de desesperada carrera, tropezó con un saliente, con el infortunio de rodar varios metros hacia abajo, cayendo en lo que parecía una especie de nido de aquellos esperpentos. En ese momento, supo que ya no había escapatoria. Las esperpénticas crías se abalanzaron sobre ella propinándole feroces dentelladas. ¡La estaban devorando viva!
Bienvenidos al universo de Benighted.

«Obscene Repressed» es el nuevo trabajo de los Brutal Death Grind Benighted. El disco se lanzó el pasado 10 de abril de 2020 gracias a Season of Mist.

El line up del combo es: Julien Truchan (voz), Pierre Arnoux (bajo y voces), Emmanuel Dalle (guitarra), Kévin Paradis (batería), Fabien «Fack» Desgardins (guitarra).

Nada, cada lanzamiento que editan los franceses lo bordan. No me explico cómo pueden mantener la calidad disco tras disco a pesar de los años. De verdad, esto tíos son dignos de ovación. Con su nueva obra, los amantes de la música más salvaje estamos una vez más de enhorabuena. De nuevo, recibimos con los brazos abiertos unas composiciones variables y salvajes, que aúnan lo mejor de los estilos anteriormente mencionados. Como de costumbre, la celeridad y la intensidad son el denominador común de todos los tracks que componen el susodicho plástico. La producción es completamente nítida, mientras que la portada hiela la sangre a cualquiera.

Quien busque «hachas» peligrosas y contundentes está de enhorabuena. Emmanuelle y Fabien es precisamente lo que regalan. Usan de forma muy equilibrada el tremolo picking y la fluidez, que junto a riffs netamente hardcoretas forman una muralla sónica impenetrable. Las dobles armonías son prácticamente anecdóticas mas no inexistentes. De igual forma, también hay escasez de solos. Podréis deleitaros con la lead guitar únicamente en ‘Mom, I Love You the Wrong Way‘.

La versatilidad de los registros vocales es maravillosa. Atentos, que menos barítonos rasgados limpios, shrieks y falsetes tenemos de todo. Sí amigos, festival de growls tanto profundos como agudos rasgados, tonos afines a la nueva escuela Hardcore e incluso Pig squeals.  

Las cuatro cuerdas ganan presencia en ‘Brutus‘, ‘The Starving Beast‘ y ‘Bound to Facial Plague‘.

En cuanto a la percusión, lo arrasa todo a su paso. Lo de Kévin no es humano. ¡Ración increíble de blast y up tempos!

Estamos ante otro de los Elepés del año. No puede faltar en vuestra colección. Ah, casi se me olvida, el sello ha creado un Box Set limitado que yo de ser vosotros lo adquiriría sin pensarlo. Ahí dejo eso.

Nota: 10
Autor: Chus

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