Crítica: Deathmarch – Dismember (2017)


Delicada línea del tiempo que nos separa de la eternidad, de la ausencia a un segundo de existencia en este espacio terrenal directo a una marcha de muerte (Deathmarch) y contra ella, cada instante de vida es una victoria que ganamos, donde lo único seguro al final de la historia es ella, la muerte.

El combo holandés de Death Metal Deathmarch, lanzó el pasado 15 de diciembre de 2017 su hasta la fecha último E.P «Dismember» gracias a Black Lion Records.

¿»Quienes forman el conjunto?» os preguntaréis algunos. Pues bien, yo os lo digo: Walter van Kalsbeek (bajista), Olle Oele (batería), Quint Meerbeek (guitarra), Olav Bus (vocalista). 

El mundo gutural está completo con estas voces provenientes de un infierno más cercano donde los cuerpos por doquier, las entrañas bañando la sala, el olor a sangre fresca impregna el lugar y de fondo se puede escuchar Deathmarch con ese particular ritmo de las guitarras al viento. El doble pedal que no da segundo de descanso una vez se pone en marcha en marcha. El cuarteto no se ha dejado en el tintero arremetiendo con todo lo que puede contener el Death Metal. Para ser su primer Extended Play, han demostrado que tienen mucho potencial. Todo el álbum es caña pura y dura. No había disfrutado tanto de hacer una reseña como esta, al escuchar todo el redondo. Estoy a la espera de su siguiente material y de momento voy a disfrutar mucho de estos temas. 

Nota 9
Autora: Yessyca Wolff

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