Memorias de un No Muerto: Rites to Sedition – Ancestral Blood (2017)

El portal dimensional se abrió ante la maligna mirada de satisfacción de los dos brujos más poderosos de la Tierra. Al fin, el ente cósmico conocido como Laucrl volvió al plano astral de los humanos. De inmediato, los hechiceros recrearon una serie de sellos con las manos. Su intención era mantener al monstruo de las estrellas bajo su control. Sin embargo, sus ataques de contención mística no sirvieron de nada. El esperpento arremetió contra ellos. Sus terribles tentáculos los golpearon con tal fuerza, que los frágiles cuerpos de los chamanes se partieron en dos. Nada ni nadie podía frenar semejante poder. Una nueva era de terror acababa de empezar en el astro azul…
Bienvenidos al universo de Rites to Sedition.

«Ancestral Blood» es el título del primer L.P de los Melo Symphonic Black Metaleros Rise to Sedition. El redondo, salió de forma independiente el 29 de marzo de 2017.

Su line up es: Jesse Lane (bajo), Mitch Moore (batería), Jon Westmoreland (guitarra), Gabriel Lucia (voz, guitarra y teclados).

A los de Estados Unidos no se les puede toser señores. Tremendo debut el que se han marcado. La sensación de grandilocuencia y caos que desprende el Elepé es apabullante. No contentos con ello, todas y cada una de las tonadas tiene unos desarrollos tan variados como elaborados, convirtiendo su escucha en una absoluta gozada. Ah, y para los haters del teclado como yo, he de comentaros que de verdad está bien usado. Ni eclipsa las «hachas» ni se exceden con él. Dentro del apartado de la producción, el sonido es bueno, mas podrían haber subido el volumen de los tambores un poco. Lo que desde luego acaba siendo el talón de Aquiles es la portada. No sé a vosotros, pero a este humilde redactor le resulta demasiado amateur.

El tremolo picking y las dobles armonías cargadas de melodías campan a sus anchas a lo largo y ancho del plástico. Como era de suponer, tampoco faltan los riffs fluidos y las disonancias. ¿Solos hay? Sí y no. Oídlo y sabréis por qué digo esto.

Tonterías ninguna con los registros vocales. Gabriel saca de sus cuerdas vocales unos alaridos intensos y violentos en todo momento.

La percusión es dinámica hasta decir basta. Festín de «golpes relámpago», mid y up tempos.

Destacaría las iniciales ‘Waveform 66’ y ‘The Moon Titan Phylon’. Si necesitáis dos buenos ejemplos de cómo se las gasta el cuarteto, ponedles atención a esos dos cortes. 

Confieso que no soy amante de los «organillos», y por consiguiente tampoco de esta forma de ejecutar Metal Extremo. No obstante, cuando algo es bueno lo es y hay que valorarlo como se merece. ¿Los apruebo?, ¡claro que sí!, ¡y con nota!

Nota: 7,5
Autor: Chus

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