Crítica: Aurora Borealis – Apokalupsis (2018)

---

El Creador, un ente viviente con increíbles capacidades, envió a su hijo a la Tierra. En un principio, su vástago consiguió congregar una buena base de fieles a base de usar sus poderes cósmicos. Resucitó a personas, y multiplicó los alimentos de todo un pueblo. Su fama fue agrandándose, al igual que la envidia que muchos sentían por él. Después de ser traicionado y crucificado, su familia llegó al planeta con pequeñas naves espaciales perfectamente camufladas para recoger su cadáver. La situación no podía quedar impune. Había llegado la hora de una implacable venganza, tan sutil como lenta. Cubrieron la atmosfera del astro azul con una serie de sustancias que les afectaría a su sistema nervioso. Esto haría que el cerebro de cada generación fuera más decadente e inestable. Tan solo había que sentarse y ver como ellos mismos caminaban hacía su propia aniquilación…….
Bienvenidos al universo de Aurora Borealis.

El veterano combo de Black Death Metal americano Aurora Borealis comenzó su andadura en el ya lejano año 1994. Tras 23 años de carrera, el 15 de mayo de 2018, el sello Casus Belli Musica junto al sello Beverina, nos traerá su septimo L.P titulado "Apokalupsis". Durante estas líneas, Broken Tomb os ofrecerá su correspondiente reseña.

El line up es: Ron Vento (guitarra, voz y programaciones. Ex-Imperial Crystalline Entombment, ex-Gothic Outcasts, ex-Lestregus Nosferatus), Jason Ian-Vaughn Eckert (bajo. A su vez componente de  Sylvan Realm, Todesbonden, ex-Imperial Crystalline Entombment, ex-As the Sea Parts, ex-Rain Fell Within (live)), Mark Green (batería. Asimismo, forma parte de Embludgeonment, ex-Amorphic Form, ex-The Adept, ex-Insatanity, ex-Pyrexia).

Para que nos vamos a andar por las ramas. Hermanos, estamos ante uno de los mejores discos de 2018. Esta maravillosa OBRA MAESTRA lo tiene absolutamente todo: composiciones trepidantes, técnica y frescura. ¿Qué más se puede pedir?

Es curioso como una agrupación con tantos años a sus espaldas mantenga la capacidad creativa en tan buena forma. Esto es talento y lo demás son tonterías. Por otro lado, la producción está a la altura de las circunstancias, siendo nítida y contemporánea, añadiendo un artwork muy de ciencia ficción.

Los riffs os van a dejar boquiabiertos. Los hallamos fluidos, pesados, a doble armonía, a una cuerda e intrincados si es necesario -os aseguro que estos tíos saben tocar muy bien-. Por cierto, adjuntan unos solos tan melódicos como iracundos. Si es que cuando las cosas se hacen bien…..

En cuanto a los registros vocales, nos topamos con una doble tonalidad. Shrieks y growls, conviven sin ningún problema, predominando claramente los primeros.

Los parches suelen estar aporreados a mil por hora. Velocidad a raudales sin olvidar en ningun instante el concepto de versatilidad. La batería no conoce la palabra "estático".

Ante tal brillantez, solo puedo quitarme el sombrero y felicitar de corazón a este power trio. Es imposible destacar ningún track sobre otro, ya que la cohesión es enorme. Aquí no hay altibajos ni nada que se le parezca.

Si después de leer esta crítica decidís pasar por alto este álbum, es que algo funciona mal en vuestras cabezas. El susodicho C.D no puede faltar en vuestra colección, de verdad os lo digo.

Nota: 10
Autor: Chus

Facebook

Página Oficial

Bandcamp

Instagram

Twitter