Crítica: Grave Noise – From the Cradle to the Grave (2018)

"BrokenTomb"


Al llegar al plano astral del cual fue expulsado hace millones de años, el ente cósmico emitió una escalofriante carcajada. Había llegado el momento de recuperar lo que era suyo por derecho. Usando sus terribles habilidades, cubrió la Tierra con un espeso manto de humo ennegrecido. El efecto que causaba en los humanos al respirar la extraña sustancia era inmediato. Sus ojos se tornaban completamente blancos, mientras que su mente se embotaba por completo, transformándose en seres sin voluntad. Desde ese momento, el monstruo estelar usó a sus nuevos siervos para modificar por completo el planeta. Había comenzado una nueva era, y en esa ocasión no cometería ningún error. Jamás nadie volvería a expulsarlo de allí.

Bienvenidos al universo de Grave Noise.

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El combo de Thrash Metal procedentes de Castilla y León Grave Noise comenzó su andadura en 20013. En 2015 publicaron la Demo "Self Destroy Us". Finalmente, el sello Rock-CD Records publicó su primer E.P. "From the Cradle to the Grave" el 25 de mayo de 2018.

El line up es: Iker Sanz (guitarra y voz), Edu Sanz (guitarra), "Banzo" Berzosa (bajo y voces), Fer Mediavilla (batería. Ex-Sarkástika).

Señores, no entenderé jamás por qué surgió el revival de un género que tristemente murió a principio / mediados de los 90. Las causas del deceso no fueron otras que el exceso de bandas clónicas carentes de frescura y calidad.  En la actualidad, y a partir del nuevo boom del año 2000 se han cometido los mismos errores que entonces. Que estúpido ¿verdad?, hoy por hoy formaciones actuales que en los años dorados del estilo hubiesen sido apaleadas por la crítica son encumbradas, como si de auténticos dioses del movimiento se tratara. Una verdadera lástima. Este hecho consigue provocarme un sentimiento de frustración. Podríamos decir que hay dos tandas de Thrashers: los veteranos, y los novatos que descubrieron este subgénero no hace demasiado tiempo. Obviamente, estos últimos al estar menos "entrenados" realizan una peor criba. Pues bien, el grupo que hoy nos atañe está enfocado sobre todo a un público neófito. El disco, a pesar de ser correcto no aporta absolutamente nada. Las estructuras de las tonadas son manidas, los solos no sorprenden y para colmo resultan descafeinados en según qué momentos. Al decir todo esto pensaréis "por Odín, tienen que ser nefastos". Pues no, no lo son. No obstante, es necesario entender que hay saltos generacionales, y que al obtuso redactor que ahora mismo está escribiendo estas líneas tiene 36 años, de los cuales lleva oyendo "Metal Apaleador" – no solo Big Four americano y alemán- 23.

Los riffs, como era de esperar están más afilados que la hoja de una guillotina. Los hallamos fluidos, pesados, a doble armonía y acústicos. Por otro lado, la lead guitar hace una labor sólida pero nada sorprendente.

Respecto a los tonos vocales, éstos son grabes e iracundos, añadiendo algún registro más alto de forma puntual. Ah se me olvidaba, también hay retazos de coros.

La batería, suele estar ejecutada en lo que yo denomino como up tempo de pulso lento. Hay velocidad sí, pero no consigue ser trepidante.

Personalmente destacaría "Brain Wash" por ofrendar unas loables seis cuerdas que os provocará el headbanging de inmediato.

Tal vez para muchos el redondo pase sin pena ni gloria por su reproductor de música habitual, pero para otros podría ser la puerta de acceso a este mundillo. En vuestras manos está el darles la oportunidad que por supuesto merecen.

Nota: 5

Autor: Chus

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