Crítica: Nuckin’ Futs – Abyss (2017)

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"Los Subterráneos" habían sido prácticamente exterminados por los colonos provenientes del espacio. Ese seudónimo se les fue impuesto después de que éstos perdiesen la batalla por el control del planeta y sus recursos naturales, "los exploradores", consiguieron confinar a la población original del astro a las catacumbas que se encontraban al este del globo.
Las cavernas estaban conectadas unas con otras, formando un terrible laberinto. Durante décadas, los planes de recuperar lo que por derecho era suyo se fue gestando en una población mermada por los bastardos que llegaron de las estrellas. Paulatinamente, y gracias a los robos a las fábricas de armas, los del subsuelo se fueron equipando. Por otro lado, y aprovechando lo enrevesado de su territorio, decidieron urdir un plan. La intención era forzar a los colonizadores a tener que bajar a sus dominios. Una vez allí los intentarían exterminar……
Bienvenidos al universo de Nuckin´Futs.

 

Barcelona vio nacer en 2012 al combo de Thrash Metal Nuckin´ Futs. Un año más tarde de su nacimiento como grupo apareció el E.P "Evilution". En 2014 llegó el L.P "Slavery". Finalmente, el sello Blood Fire Death, editará el 1 de diciembre de 2017 su segundo Long Play "Abyss", al cual este humilde redactor os ofrecerá gustosamente en estas esquelas su reseña.

El line up es el siguiente: Hector Rodríguez (batería. Ex-Bastards), João Sassetti (guitarra solista), Oscar Esteve (guitarra rítmica. Ex-Elathan, ex-Bastards), Tolo Juan (voz), Sergio López (bajo. Ex-Reek).

Cuando estalló a principios del 2000 el revival de este tipo de música, me percaté que la inmensa mayoría de las formaciones poco o nada aportaban a un género que tristemente murió a mediados de los 90. Los clones de los clones volvían a la palestra campando a sus anchas, obteniendo el beneplácito de una nueva generación de metalheads ávidos de unos sonidos que por su temprana edad no habían conocido y estaban descubriendo en esos momentos. A pesar de ello, no todo lo que ha surgido desde entonces es basura. Buen ejemplo de ello son estos catalanes, que han sabido explotar hasta extremos este tipo de metal. Sus composiciones están realmente trabajadas, abrazando por momentos el Technical Thrash, añadiendo un dinamismo inusitado y sorprendente a su propuesta, que hace que personas como yo solo puedan quitarse el sombrero y reverenciar semejante trabajo. Con grupos así aún hay esperanzas.
Sin embargo, personalmente la por otro lado versátil garganta de Tolo Juan me ha resultado desesperante en según qué instantes del disco, restándole irremisiblemente enteros al cómputo final.
La producción es seca y nítida, adjuntando un impresionante artwork.

Los riffs no podrían ser más trepidantes, añadiendo un escaparate variado que maravillaría al más escéptico. Los hallamos fluidos, punzantes, pesados y carentes de distorsión. Además, como comentaba unas líneas más arriba ese punto de dificultad añadida a sus hachas es apabullante. Todo ello lo adornan con unos sanguinarios solos.

Las voces son agresivas, pero en mi humilde opinión llegan a chirriar.

La batería es veloz, pero Hector Rodríguez sabe perfectamente cuando levantar el pie del acelerador y sacar una sonrisa con ciertos detalles que mejor que descubráis por vosotros mismos.

El bajo gracias a Odín tiene presencia. Este instrumento no solo acompaña las quintas de la rítmica, y eso es de agradecer.

Personalmente destacaría "Cradle Of Hypocrisy", "Abyss" y "Primal" por los siguientes motivos:

Destellos de "hachas" a una cuerda y growls a cuenta gotas hace de "Cradle Of Hypocrisy" un viaje sin retorno al más profundo de los avernos.

La progresión y canjes de camino de "Abyss" demuestra con creces la grandeza de estos tíos. ¡Qué maravilla!

"Primal" es simple y llanamente la canción más salvaje de todas. Esto en directo tiene que ser destructivo.

Thrashers del mundo, no dejéis de escapar este plástico u os arrepentiréis toda la vida.

Nota: 7,5
Autor: CHUS

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